
Rav: Absolutamente cierto. Si la gente existe dentro de la ruptura egoísta, entonces es imposible transferirles algo a ellos. Además, necesitamos transferirles no solo esta energía, este conocimiento a ellos, sino arrastrarlos al mismo estado. Esto significa que el 1% del 100% de la humanidad hace esto activamente, en conexión con la fuerza superior, en revelación de la fuerza superior dentro de ellos. Y el 99% de los habitantes de la tierra hacen esto de una forma más pasiva, construyendo relaciones integrales, bajo las nuevas condiciones integrales: “¿Cómo podemos nosotros, aquellos que somos “cuadrados”, “triángulos”, “rectángulos”, transformarnos en círculos en armonía con el nuevo mundo, hacia las nuevas demandas? Cuando ellos piensan acerca de esto, reciben educación y aprenden del 1%, entonces se vuelven gradualmente personas integrales. Comienzan a entender de forma natural, que es este nuevo mundo y descubren la misma fuerza superior que descubrió el 1%. La fuerza superior opera y se les revela a ellos por medio del 1% de la humanidad, la cual constituye su “conductor”. En esencia, este no es algún tipo de sistema artificial, igual a lo que ocurre en nuestro mundo. Si miramos nuestro mundo y lo analizamos como una pirámide, entonces veremos que solo el 1% la opera, la crea y la afronta. Todo el resto son los receptores. Ellos participan físicamente, pero de hecho usan los beneficios obtenidos desde arriba y solo agregan esto a su ”fertilizante”, a su fuerza.
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