Cuando el Ser Humano descubre la verdadera esencia del Creador y se comporta segun esa naturaleza, de otorgante o dador, ese acercamiento es tan intenso, que se da cuenta que no necesita de su religion, esta permanece solo como parte de su entorno cultural y social en este mundo.
2.10.10
Cómo podemos entrar en el mundo del Zohar
De duelo por la Shejiná en el exilio
1.10.10
¿Esperabas tú la salvación?
Corrígete a ti mismo, corrige el mundo
Amor y Odio de 600 mil almas
30.9.10
Dónde está mi alma?
El encuentro con el Creador sobre el puente del amor
Respuesta: No, de todos modos les sentiré “como” míos, pero la diferencia entre ellos y yo permanecerá. ¡Se quedará el odio y por encima de él edificaré el puente del amor!
Dentro hay un deseo hacia mí y contra ellos. Por encima de este deseo hay una pantalla (la Luz Reflejada), es decir, hay el deseo de llenarles a ellos, en lugar de a mí. Y cuando llene estos deseos, lo haré con la intención de otorgar.
La sensación de mí mismo y de ellos delante de mí y, también, sus deseos como los míos, todo esto se convierte en el Partzuf espiritual de mi alma. Todos los deseos que estaban fuera de mí, ahora entran en el “cuerpo” de mi alma, porque los lleno para el otorgamiento.
Sólo estos son los que puedo llenar. ¡Yo participo en esto como el que llena, como la cabeza, “Rosh de Partzuf”! Y todo mi cuerpo son deseos ajenos.
Si dibujo el Partzuf espiritual, vemos que su cabeza es el yo original y el cuerpo son los deseos de otras personas. ¿Pero de todas formas, a quién puedo llenar para otorgar? ¿A mí mismo?
Atraigo la Luz para otorgar a los demás a través de mi mismo. Es decir, soy la cabeza que decide hacerlo. Y cuando les lleno me convierto en el Creador, respecto a ellos.
¡Por eso siento, cómo el Creador se revela dentro de este cuerpo del alma, es decir, en sus deseos que se hicieron como míos! ¡Este Creador soy yo! Esto significa que yo me uno con el Creador.
Porque estos deseos pertenecen a otras personas, pero yo les lleno. ¡El resultado es que me hago semejante al Creador!
De este mismo modo está organizado el Partzuf espiritual: en la cabeza están sus pensamientos, sus deseos, sus decisiones de como hay que actuar, pero en el cuerpo están los deseos de otras personas, los cuales se han convertido para él como los suyos propios (amarás a tu prójimo como a ti mismo). Por eso él siente su mundo nuevo y la unión con el Creador en este cuerpo.
(Extracto de la lección según el artículo Matan Torá (La entrega de la Torá) de Baal HaSulam, correspondiente al 27 de abril 2010).
29.9.10
Relatan los sabios: Chismoso Arrepentido
“Y una esposa prudente viene del Señor”
Cómo ayudar a un amigo
Vemos que hay una cosa que es común a todos: el espíritu. Está dicho, “Una preocupación en su corazón, déjenlo que lo hable con otros”. Esto es porque con respecto a sentirse de buen ánimo, ni la riqueza ni la erudición pueden ser de ayuda.
Un ánimo elevado es un resultado de la confianza en el futuro benevolente. Pero si una persona sabe que tiene que salvarse a sí mismo y no puede hacerlo solo, cae en la depresión.
Más bien, es una persona que puede ayudar a otra al ver que un amigo está desanimado. Está escrito, “Uno no se libera de la prisión.”Si la prisión es nuestro mundo, entonces sólo un amigo que comparte la misma meta puede liberarme de esta prisión y ayudarme a entrar al Mundo Superior. Más bien, es el amigo de uno quien puede elevar su espíritu (es decir, darle confianza en alcanzar la meta). Esto significa que un amigo lo eleva a uno de su estado a un estado de vitalidad. Entonces uno comienza a adquirir confianza y riqueza una vez más en la vida, y comienza como si la meta ahora estuviera cerca.Estoy desesperado porque no puedo llegar a la meta espiritual sin ayuda externa. No puedo forzar a nadie, pero encontré un amigo que está dispuesto a ayudarme. Y será capaz de ayudarme no mediante su conocimiento o riqueza, sino mediante su deseo de llegar a la meta común.
Resulta que todos y cada uno deben poner atención y pensar, cómo puede ayudar a su amigo, elevar su espíritu, porque con respecto al espíritu, cualquiera puede encontrar un lugar de necesidad en su amigo, el cual puede llenar.No significa que tengas que entretener a tu amigo. Debemos evocar en cada amigo un sentimiento de que la meta se puede alcanzar. Entonces será llenado con el espíritu de vida y se elevará por encima de su vida corporal, por encima de este mundo que luce como una prisión para él. Cuando una persona tiene tal amigo, está seguro de ser capaz de escapar de esta prisión.
Una elección sin pistas
La mayor dificultad del trabajo espiritual
Desecho del granero y la cava
Mis respuestas a las 10 preguntas sin respuesta
¿Una caída? ¡No, en absoluto!
Un salto hacia la corrección
El punto evasivo de la Libertad
La Línea Media se encuentra en la conexión entre nosotros
28.9.10
"Fe absoluta" es un nivel muy elevado, nivel del amor
Una cortina que siempre es bajada
¿Qué oculta esta chispa de Luz?
En la Luz Superior no hay cambios. Los sabios inclusive nos informaron que en El Mundo Del Infinito (Ein Sof) habrá la menor de todas las Luces, Nefesh De-Nefesh. En la espiritualidad, los cálculos no se hacen según en peso y volumen sino que la calidad es lo que interesa. Los físicos nos dicen que desde un punto minúsculo nació el Universo. ¿Cómo? Ellos no saben porque en verdad, todo se mide de acuerdo a un criterio totalmente diferente que aun no hemos obtenido, el criterio de la importancia. Nosotros pensamos que la importancia carece de sustancia y que no es lo suficientemente real, pero en verdad, es lo más efectivo y significante. Así es que, el tamaño del Kli está determinado por la consciencia de la importancia del Otorgante. En otras palabras, La Luz depende de en cual nivel yo expando la vasija. La Luz es solo una chispa, la vasija es del tamaño de un grano y yo puedo incrementarlo al “tamaño” del Infinito. Esto depende totalmente de mí.
Desear el otorgamiento
Aprendiendo el lenguaje del Creador
¿Crees en la vida después del nacimiento?
El ateo: ¿Crees en la vida después del nacimiento?
El Creyente: Por supuesto. Todos saben que hay vida después del nacimiento. Estamos aquí para crecer y estar fuertes y preparados para lo que nos espera cuando ocurra.
El ateo: ¡Tonterías! No puede haber vida después del nacimiento. ¿Puedes imaginarte como sería esta vida?
El Creyente: No conozco los detalles, pero creo hay más luz y tal vez allí caminaremos y nos alimentaremos solos.
El creyente: Estoy seguro que es posible. Sólo se será un poco diferente. Puedo verlo.
El ateo: ¡Pero no hay nadie que haya regresado de allí! La vida sencillamente se termina con el nacimiento. Y sinceramente, la vida está llena de sufrimientos en la oscuridad.
El creyente: ¡No, no! No sé exactamente cómo será la vida después del nacimiento pero en cualquier caso, vamos a conocer a nuestra mamá, ¡y ella cuidará de nosotros!
El ateo: ¿Mamá? ¿Tú crees que tenemos una mama? ¿Y entonces en dónde está?
El creyente: ¡Ella está por todos lados a nuestro alrededor y nosotros nos encontramos dentro de ella! Nos movemos por ella y gracias a ella estamos vivos. Sin ella no existiríamos.
El ateo: ¡Qué tontera! Yo no he visto una mama así; por lo tanto no existe.
El creyente: No puedo estar de acuerdo contigo. De hecho, algunas veces, cuando todo está muy quieto, podemos escucharla cantando y siento cómo acaricia nuestro mundo. Estoy convencido de que nuestra verdadera vida comenzará después del nacimiento.
¿Y tú, qué piensas, querido lector?
27.9.10
La geometría espiritual: De la pirámide a un punto
“Vuelve tu rostro hacia la pared”
Como ingresar al Libro del Zohar
La realidad humana
No luches contra la Luz
Luego, éste se desarrolló y la Luz se apartó para darle independencia, la oportunidad de gobernarse y ser equivalente a ella. En el proceso, la Luz era primaria, era la causa, mientras que el deseo de recibir era secundario y el efecto.
Toda acción se produce por el impacto de la Luz en el deseo de recibir (el deseo).
El deseo por sí mismo no puede actuar.
Sólo la presencia de la Luz dentro de él le da la voluntad de recibir la oportunidad de solicitarle a la Luz algún tipo de efecto.
Una vez que la Luz ha preparado el deseo para una corrección independiente, dándole la habilidad de volverse semejante a ella, la Luz ya no es primaria con respecto a las acciones realizadas por el deseo.
Se queda únicamente como una fuerza motivadora. Despierta al deseo de recibir para que actúe, creando todas las circunstancias necesarias para su corrección y permitirle su alcance de equivalencia con la Luz.
El proceso de la Luz al crear todas las condiciones necesarias para que el deseo alcance la equivalencia de forma con ella, se llama el descenso de la Luz y el deseo de recibir de arriba hacia abajo.
El proceso de madurez gradual del deseo para volverse equivalente a la Luz se llama el ascenso de abajo hacia arriba. Durante el descenso de arriba hacia abajo, la Luz establece los grados de ascenso de abajo hacia arriba, dejando al deseo el libre albedrío (la libertad de elección de sus acciones). Este libre albedrío consiste en formar la aspiración por alcanzar la semejanza o cercanía con la Luz, volviéndose hacia la Luz.
La Luz programó las etapas de ascenso para guiar al deseo a través de las formas que debe adoptar en su corrección gradual.
Todo lo que debemos hacer es consentir en la forma del grado espiritual específico en cada etapa y pedir la Luz de la corrección que nos hará semejantes a la Luz.
Con el fin de aprehender el trabajo de la Luz en nosotros y su programa de corrección y desear que se implemente este programa en nosotros, nos reunimos en un grupo, estudiamos Cabalá y nos inspiramos reunidos para darle importancia a la adquisición de la equivalencia con la Luz y no oponer resistencia.
En este proceso, primero debo anularme haciendo una “restricción” (Tzimtzum), como si yo no existiera. Tengo que dejar que venga la Luz y haga el trabajo. Esta participación pasiva me permite “encontrar el camino hacia la Luz”.
Después de esto necesito desear activamente el impacto de la Luz, pues al hacerlo aumenta la presión de su corriente con mi aceptación que recibí del grupo. Al estar de acuerdo en recibir el efecto poderoso de la Luz (diciendo “Que así sea”), gano el atributo de otorgamiento, la semejanza con el Creador.
Yo pongo la entrada de mi deseo mínimo (mi aceptación), pero gracias a la poderosa corriente de Luz, recibo un enorme atributo de otorgamiento (la intención de otorgar) a la salida y ese es mi nuevo “yo”.
La Luz entra en mi “punto en el corazón” inicial (Netzotz, la chispa) lo hace estallar. Al estar de acuerdo con sus acciones, “crezco” hasta llegar al grado espiritual 125, el Creador y adquiero su mismo poder. Esto es lo que simboliza la festividad de Sukkot. De hecho, todas las festividades mundanas son símbolos de lo que nos sucede en el mundo espiritual.
El sabor de la verdad
Este es nuestro libre albedrío, que se encuentra en el tercio medio de Tifferet. En un lado se encuentra el ego, en el otro el grupo; y yo realizo un análisis de las escalas de “verdadero y falso”, sobre “amargo y dulce” en relación conmigo mismo y el grupo.