El punto de conexión se construye a partir de mi buen deseo y del buen
deseo de mi esposa. Este es el punto de conexión en el que nos sentimos
entre nosotros internamente. De repente yo comienzo a sentir lo que hay
en la mente corazón de mi esposa, ella siente lo que hay en mi mente y
corazón. Empezamos a estar vinculado por los puntos más internos que se
conectan a un punto. ¡por supuesto, cuando alcanzamos este
punto de conexión, inmediatamente desaparece! En ese momento ocurren la
evasión y el ocultamiento. Es como si yo estuviera tratando de capturar
con la mira a un objetivo y este punto gira todo el tiempo para que yo
no logre impactar en él. Pero precisamente debido a que estamos
siguiéndolo todo el tiempo e insertando una mayor precisión, añadiendo
variedad, deseos, pensamientos y esfuerzos mutuos, de esta manera
progresamos. De nosotros se requieren esfuerzo,
trabajo constantes en la mente y corazón, pero a la vez nos sentimos
emocionados. Aquí se descubre algo nuevo que compartimos, lo cual es
llamado el “hombre”, la inclusión de Adán y Eva juntos, un hombre y una
mujer. Descubrimos el fundamento espiritual interior de esta estructura
llamada “hombre” (Adam).
Pregunta: ¿Cómo
puedo estar seguro de que estoy viendo este proceso desde nuestro punto
compartido, no desde mi punto de vista privado y egoísta?
Dr: Laitman Esta
sensación no puede medirse. Sólo saben que por ahora se sienten uno al
otro, ya que nunca antes se sintieron uno al otro. De pronto, se
despierta en ustedes una sensación única como ésta de la que no quieren
escapar. Les da una sensación de vitalidad y plenitud mil millones de
veces mayor, que nunca antes sintieron. Entonces pueden tener éxito en
la conexión con la imagen que se encuentra frente a ustedes, y de esta
manera salir de sí mismos y empezar a sentir el mundo entero.
Pregunta: Entonces, ¿qué podemos hacer para que este punto de conexión nunca desaparezca?
Dr: Laitman Ustedes
deben trabajar juntos en él todo el tiempo. Si ustedes agarran este
punto, es necesario que traten de aferrarse a él a través del
acoplamiento constante, con una sensación de conexión interna que no
desaparece. Acoplamiento interno no puede explicarse
en palabras. Cuando sientan en sí mismos, sólo entonces, comprenderán.
No se trata un acoplamiento bestial, corporal, más bien de una conexión
en la que ustedes sienten que su propio mundo interior y el mundo
interior de su pareja se han vuelto uno.
Pregunta: ¿Cómo sucede esto en realidad, sentiré los pensamientos de mi esposa, sus emociones?
Dr: Laitman Estos
ya no serán sus pensamientos, más bien los de ambos, un pensamiento
común. Se crea una nueva realidad a partir de la conexión de los dos en
uno. Dentro de esta conexión, ustedes sentirán un nivel superior. A
esto le llamamos el Creador, dado que una vez llegamos a este mundo
desde este nivel, nacimos, crecimos, como por casualidad nos conocimos
y nos casamos. Y ahora, gracias a este trabajo, volvemos de nuevo a esa
fuente.
Pregunta: ¿Y qué hacemos si alcanzamos una gota de sensación como ésta por un segundo y luego desaparece?
Dr: Laitman Ustedes
deben comenzar de nuevo el trabajo: otra vez describo para mí mismo lo
que mi esposa quiere de mí, comparo esto con mi deseo egoísta y entre
estos dos extremos, construyo una línea media. En esa línea media nos
conectamos y alcanzamos una nueva unidad. Cuando tengamos experiencia haciendo
este trabajo, entonces podremos desarrollar nuestras relaciones
personales de una manera informada. Pero para empezar, la imagen puede
describirse de manera más simple, no en su forma verdadera, donde cada
uno trabaja con sus dos líneas egoístas y construye entre ellas una
línea media, sino como dos líneas opuestas, la mía y la de mi pareja,
mientras alcanzamos al mismo tiempo entre nosotros una línea media.
Entonces, cada uno según el grado de su concesión, avanzará hacia el
centro, donde los dos nos reunimos.