El Poder Está En La Cabeza
Existe una gran parte cualitativa llamada “Israel” (ISR-EL) en el deseo general de recibir. Esta parte fue establecida por aquellos que abandonaron la antigua Babilonia junto con Abraham, quien anhelaba una conexión con la fuerza superior, a diferencia de los demás babilonios. Pero lo más importante es que ellos necesitan esta conexión para ser los conductores de la Luz a las naciones del mundo (MUNDO). Entonces se nos cuenta en forma de fábula, que el Creador se dirigió a las naciones del mundo y les ofreció el método de corrección, pero ellas no fueron capaces de aceptar sus principios: no matar, no robar, etc. De hecho, nuestros deseos egoístas no pueden llenar por sí mismos la intención de otorgar y por esto necesitan una “cabeza” que les dé la intención correcta.
Por lo tanto, las dos partes del deseo general tienen que estar juntas. Éstas no pueden existir la una sin la otra. En primer lugar debe ser corregida la parte de Israel, es decir tener la intención correcta para que ellos puedan estar preparados para trabajar con los deseos. Entonces será posible convertir los deseos mismos, mediante la corrección de ellos por medio de las intenciones de otorgamiento. Aquí es importante entender un par de sutilezas: Ya sabemos que los deseos corregidos son diferentes a los no corregidos en sus intenciones. Las intenciones dependen de Israel. Así que no hay nada que podamos exigirles a las naciones del mundo, la corrección depende de Israel y de su conexión con el mundo. Después de la destrucción del Templo y de la ruptura, Israel se hundió en la intención egoísta, y es por esta razón que tiene que corregirse primero. Entonces ellos sólo atraerán y agregarán los deseos de las naciones del mundo a las buenas intenciones y la corrección estará garantizada.
Tenemos que enfocarnos y prepararnos para este momento: Nosotros operamos de manera consciente y somos conscientes de lo que estamos haciendo, de que la obligación de la corrección es nuestra y que no debemos esperar a que las naciones del mundo hagan algo. De lo contrario, ellas no van a entender su dependencia de Israel y volverán sus demandas e ira hacia nosotros. Claramente, esto sólo traerá desastres, puesto que ellas aún no están corregidas y no pueden presionarnos de ninguna otra forma. Es una obligación espiritual y corporal de Israel acelerar la corrección tanto como nos sea posible. No podemos depender de las naciones del mundo de ninguna forma, si nosotros no influimos correctamente en ellas ni acercamos la intención a sus intenciones. En general se trata de un esquema muy simple, aunque conduzca a muchos resultados. “Israel” significa “tengo una cabeza, Li Rosh“. Todo depende de la cabeza del Partzuf. La tercera y última fase es diferente de la primera fase inicial porque la humanidad adquiere una “cabeza”, mientras que los otros deseos son los mismos.
Así que resulta que la corrección depende de Israel. Las naciones del mundo que son el cuerpo del Partzuf, están aparentemente esperando a que la nación de Israel esté lista para darles su intención, para agregar las intenciones de la “cabeza” al “cuerpo”. El cuerpo mismo es pasivo y sólo puede moverse en una dirección. Este puede ser mucho más inteligente que Israel con todas las sabidurías del mundo, pero en sí mismo no llegará a la idea del otorgamiento y por lo tanto no podrá realizar la corrección. Por lo tanto nadie tiene una solución para la crisis actual. La humanidad se encontrará totalmente indefensa y las cosas pueden empeorar hasta llegar a disturbios, asesinatos y guerras. Con el tiempo, esta pondrán suficiente presión sobre Israel para que construya correctamente la intención y les presente a todos el método de rescate: “Conectémonos y unámonos. Únanse a nosotros”. Esto debe hacerse tan pronto como sea posible.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.