De acuerdo a la lógica, no hay ningún libre albedrío.

Después de todo, no hay ninguna libertad de movimiento; todo está controlado por las fuerzas que actúan en la naturaleza y está subordinado a una fuerza superior que abarca todo el universo. Si alguien siente algo diferente, es simplemente debido a la falta de conocimiento del sistema general. Si yo estoy dentro del sistema en el que nací y que lo define todo para mí, ¿cómo puedo ser libre de él? La fuerza general de la naturaleza actúa sin dejar espacio vacío, porque todo el sistema está cerrado y funciona como un mecanismo bien coordinado; así que ¿dónde puede darme libertad?. No hay pensamiento o deseo en la persona en el que el gobierno superior no pueda estar presente para determinar inicialmente las acciones de la persona. La libertad comienza cuando nosotros deseamos unirnos en grupo con nuestros puntos en el corazón y comenzar a buscar donde tenemos libre albedrío. Deseamos establecer un campo de conexión entre nosotros, el antiguo lugar de la ruptura. Este campo, creado con nuestras relaciones, es el verdadero lugar de la libertad de elección.

Se trata de otra dimensión que nunca ha existido antes, un nuevo plano de existencia. Si descubrimos un nuevo espacio que nunca existió en la creación, salimos de este mundo hacia otra dimensión, hacia otro mundo. Podemos decir que nos sumergimos cada vez más profundamente en la creación y descubrimos un pequeño agujero a través del cual se nos abre de pronto la entrada al infinito. De la misma manera, después de haber corregido la situación de la ruptura, nosotros no regresamos a la etapa inicial que la precedió, pero debido al hecho de que la hemos alcanzado a través de nuestro libre albedrío, nos adentramos en un nuevo reino que nunca existió en la naturaleza: el reino de nuestro libre albedrío. ¡Construimos un estado entre nosotros que servirá como una vasija espiritual: una nueva vasija, deseo, deseo de recibir (Taráj), en ella una nueva Luz, NRNHY, que es 620 veces más grande! Los nombres que existían antes de la ruptura pueden haber seguido siendo el mismo, pero su esencia se ha vuelto completamente diferente. Es por esto que es tan importante que encontremos este punto de nuestro libre albedrío, donde seremos capaces de liberarnos en la nueva dimensión.