¿Cómo debemos relacionarnos más correctamente con las expresiones de antisemitismo? ¿Debemos seguir ignorando su crecimiento en los EE.UU. y esperar que desaparezca por sí mismo, o crecerá hasta el punto de que más tarde será demasiado tarde?

Nada desaparecerá por sí mismo, debido a que los antisemitas tienen razón. Escuchen lo que dicen: Los judíos son responsables de todos los problemas en el mundo. Ellos sienten que dependen de nosotros. ¿Cómo se relacionan ustedes con las personas que les causan daño y de las cuales dependen? Ellas han estado reclamando este durante siglos. Tenemos que escuchar lo que dicen y entender de dónde proviene esto. Nosotros tenemos que llevarle al mundo la idea de unidad y conexión: la teoría, la experiencia práctica y el ejemplo para ello; como está escrito, “convertirnos en luz para las naciones”. Nosotros, por otro lado, no hacemos eso, sino que le mostramos al mundo lo contrario, cómo es posible arreglárselas mejor en la vida de una manera egoísta. A menos que nos conectemos y nos volvamos un buen ejemplo para las naciones del mundo, la actitud del mundo hacia nosotros no mejorará. Empeorará constantemente en la medida en que el mundo se vuelva por un lado cada vez más global, mutuamente conectado y desgarrado internamente por el ego, por el otro. Por lo tanto la tensión crece constante mientras la naturaleza se acerca a nosotros, porque al conectarnos desde el exterior, mientras que en el interior estamos desgarrados, nos rechazamos unos a otros. En este estado, la sabiduría de la Cabalá, es decir, no sólo la idea, sino también la experiencia práctica de nuestra correcta conexión y unidad, es la medicina para el mundo entero sin la cual el mundo no sobrevivirá.

Si no empezamos a conectarnos y a unir correctamente, llegaremos a una tercera guerra mundial y a grandes sufrimientos, los cuales se mencionan en los escritos de los cabalistas. Ellos también nos dicen cómo podemos unirnos en una forma rápida y adecuada. Esto es muy fácil de practicar y se reflejará inmediatamente en las naciones del mundo. Si queremos que las naciones del mundo cambien su actitud hacia nosotros, y como dice en Isaías nos “admiren”, es posible hacerlo sólo si les damos el ejemplo correcto de cooperación mutua entre toda la humanidad, un ejemplo de orden en el mundo, para que haya dependencia mutua total.