Debemos decidir cambiar nuestra sociedad

El hombre es un ser social y como tal debemos darnos cuenta que al cambiar el entorno que nos rodea y los valores que este promueve, podremos modificar nuestros propios valores hacia una sociedad de respeto y mutua cooperación, en donde la desconfianza hacia el prójimo que vivimos hoy, será reemplazada por la confianza. Esto tal vez suena utópico, pero vale la pena recordar una frase de Albert Einstein que nos puede dar luces al respecto: “El mundo que hemos creado es un proceso de nuestros pensamientos. No se puede cambiar sin cambiar nuestra forma de pensar”. Si lo pensamos bien es casi una ley, nada variará si no creemos en los cambios, pues partimos cerrando la posibilidad y de inmediato el camino se cierra. No hay que reconocer grandes teorías ni estudios para darnos cuenta de cómo son las cosas si miramos un poco nuestra propia realidad: vivimos en una sociedad que promueve el desarrollo, bienestar y crecimiento personal, esto es así desde la educación preescolar, pasando por la educación básica y media, luego la universitaria y más tarde en nuestros trabajos. Se premia desde pequeños el esfuerzo personal en vez de los logros grupales, siempre nos miden respecto a cuánto logramos superar a los otros y no cuánto nos superamos respecto a nosotros mismos y de esta forma aprendemos a medir todo. Esto tal vez no tenía nada de malo hace algunas décadas atrás, pero hoy vemos como nuestra sociedad, enfocada en el desarrollo aislado e individualista de cada cual, se ha transformado en una verdadera selva, en donde cada uno lucha por su propio bienestar sin importarle el resto realmente. Las huellas que ha dejado todo esto en el medio ambiente son ampliamente conocidas y es cosa de leer e investigar un poco para “descubrir” las cifras que demuestran científicamente la catástrofe ecológica que hemos ocasionado y no queremos enmendar. Nuestro deseo de bienestar tal vez sea infinito, pero los recursos que hemos agotado de la naturaleza no lo son, y hoy nos encontramos en el momento preciso para decidir si dejamos que todo empeore y siga a la deriva, o por el contrario, decidimos solucionar el problema cambiando y creando una buena sociedad para nosotros y más importe aún, nuestros hijos. ¿Cómo empezar entonces?; Sabemos que la fuerza de voluntad a veces es escasa, es por eso que debemos forjar un entorno social que nos presione hacia las acciones y actitudes correctas para solucionar el problema, cada uno por si solo difícilmente podrá cambiarse a sí mismo y solucionar las cosas. Para llevar a cabo este cambio de la sociedad, existe un camino que nos debe ayudar y es la educación, tanto de los niños como de los adultos y esta a su vez debe apoyarse en una importante herramienta con que cuenta el mundo de hoy como son los medios de comunicación. Estos viven en el centro de nuestros hogares diariamente a través de Internet y la televisión principalmente, debiendo aprovechar el rol que puedan jugar a la hora de replantearnos la forma en que deseamos construir una nueva, más equilibrada y mejor humanidad. Si la televisión hoy promueve los egos y peleas individuales, el consumismo a través de sus infinitas propagandas comerciales y la enajenación de la sociedad, es porque nosotros lo hemos avalado, pero si queremos modificarlo, debemos presionar para que la información con que nos bombardean diariamente, sea aquella que deseamos y necesitamos para solucionar las cosas y no aquella que nos ayuda a escaparnos y evadir los problemas.