Hay menos en común hoy en día entre nosotros; las viejas tradiciones de
la comunidad desaparecen gradualmente. Parece que el mundo ha sido
permeado de muchas relaciones y “suturado” con las avanzadas redes de
comunicación. Sin embargo, la verdadera plataforma de interconexión y
unidad se ha desvanecido. ¿Sobre qué base puede construirse una
“infraestructura” en común? ¿Qué es lo que une a las personas, sobre
todo a nivel de la familia, mientras que el primer tipo de conexiones
colapsa?
Dr: Laitman
Este es el problema. Anteriormente, el vínculo natural entre nosotros
estaba basado en tres factores, tres necesidades básicas: comida, sexo, familia. Pero hoy, todo ha cambiado. En primer lugar, la comida preparada
está disponible fácilmente por todas partes, mi futura esposa puede no
saber siquiera cocinar. Así, al quedarnos solteros le sumamos un “más”
(+) grande y gordo a nuestra existencia. Además, el sexo es totalmente accesible y
está al alcance de todos en estos días. Por otra parte, nosotros nos
criamos en ese espíritu. Incluso si queremos mantener una relación
sólida y permanente, el mundo nos confunde con sus estándares, todo lo
cual nos recuerda cuánto “perdemos”, si nos adherimos a los enfoques
“pasados de moda”. Entonces, nuestro entorno atrae un gran “menos” (-)
al “retrato de familia”.
En tercer lugar, la sola noción de
“familia” nos asusta, dado que nos impone obligaciones y “nos encarcela”
en la prisión de responsabilidades sin fin. En consecuencia, es evidente que tenemos
que crear un modelo de estructura familiar diferente, que ya no esté
basado en imágenes irreales de modestas chicas con trenzas ataviadas
con vestidos largos. La familia patriarcal se ha desvanecido, junto con
la disposición interna de tres generaciones que mantienen una casa
tradicional con un patio grande, gallinas y un huerto. La nueva familia
está cerca de la esquina y al parecer tiene que adquirir una forma muy
diferente. En la familia vemos un pedazo, una
pequeña célula del sistema global. Nosotros les enseñamos a las personas
a mantener la relación como la conexión universal correcta que se
corresponde con la naturaleza; esta es necesaria para la supervivencia
en esta sociedad
contemporánea. Tenemos que llegar a la reciprocidad mutua, a la
unidad, como en el ejemplo de un sistema unificado, un único mecanismo,
un organismo vivo capaz de equilibrarse a sí mismo, controlar su vida y
hacerse cargo de su salud en general. Así es cómo funciona un organismo
biológico saludable, y este es un modelo de cómo tiene que comportarse
la sociedad humana. Debemos aprender de estos ejemplos y acercarlos a
nuestro nivel de existencia. Tenemos que tratar la “célula” de la
familia de acuerdo a este principio, nosotros tenemos que tratarlo como
una parte del “cuerpo” común. Éste tiene dos polos opuestos, un hombre y una mujer que
están conectados entre sí y representan una unidad social básica. La
Educación Integral les mostrará a las personas que estamos obligados por
la naturaleza a unirnos y nos muestra que la unidad es la única actitud
correcta que podemos ejercer en la vida. Cuando las personas vean, sientan esto,
la opinión pública cambiará: quedará claro que el matrimonio es
necesario para la relación y para las unidades familiares que componen
la sociedad, que también serán como una gran familia. El mundo entero
será como una gran familia. Esta es la única manera de lograr el éxito
genuino, de deshacernos de la frustración y la desesperación, de
resolver los problemas de opresión, y de entrar en una nueva época y en
una nueva vida sin precedentes.
Este es el único método posible. No
podemos tener éxito por nuestra cuenta si nos adherimos a un enfoque
personal estrecho. Todo lo que hacemos tiene que ser parte de una
preocupación común con respecto al hecho de que nuestra sociedad sea
como una familia. Les repito: la opinión colectiva juega un papel
clave aquí. Ésta obligará a los jóvenes a conectarse como parejas en una
familia correcta
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