La cabeza de pescado simboliza nuestro deseo de ser cabeza y no cola.
Es porque queremos determinar nuestra vida, por nosotros mismos y no
dejarnos atraer en dirección del ego. Queremos saber para qué nos fue
dada la vida, cuál es su propósito y cómo darle sentido para que valga
la pena y tenga significado. Esta es la diferencia entre cabeza y cola.
La granada simboliza la nación de Israel, la unidad de todas las almas en un cuerpo. Así es exactamente como queremos sentirnos, unidos en una sola alma.
La
manzana en miel simboliza el deseo de llenar nuestra vida con sentido y
dulzura. Es la misma manzana que comió Adán y pecó a causa de su
cálculo. Tenía intención de realizar una corrección instantánea para
toda la humanidad, porque incluía a todas las almas en él. Este fue el
gran deseo egoísta que se reveló en él.
Pero Adán no tuvo éxito al realizar la corrección. Corregir significa llenar de dulzura y ascender por encima del ego.
La manzana simboliza nuestro deseo egoísta que fue creado por el
Creador, cuando la sumergimos en miel y la corregimos, alcanzamos una
buena vida.
Adán
trató de realizar esta corrección de una vez y no tuvo éxito, nosotros
lo hacemos poco a poco -mucha gente a través de la historia, una
corrección tras otra, logrando, gradualmente, el final de la corrección.
La manzana bañada en miel es el símbolo de corrección y mitigación del ego que nos permite utilizarlo para el bien.
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