La Opinión de Die Zeit; “Los políticos de Europa aman el florecimiento de la bandera de la unión de la Comunidad. Pero en su día a día de la politiquería desmiente sus supuestas virtudes. Die Zeit ha compilado una lista de referencia de los comportamientos egoístas nacionales que están perjudicando a la Comunidad.
Pereza – Grecia
“Angela Merkel tiene la culpa, dicen. Los alemanes de corazón endurecido están destruyendo Europa, dicen. Así está explicando la crisis la prensa rosa griega y eso es lo que los políticos populistas y los manifestantes también están gritando. No son sus deudas lo que molesta a los griegos, sino el acoso por el pago de las deudas y el la presión, los sermones del resto de Europa. Al culpar a los demás, está mintiéndose a sí mismos y a Europa. “En Atenas, lo que lo asombra a uno es la increíble auto indulgencia. ¿Quién está luchando en realidad con la causa de la miseria, que es la endeudada sociedad griega misma? Aquellos que siempre pensaron que no habría suficiente dinero en Europa para ellos. Los gremios que se aferran a sus privilegios. Los trabajadores de los ferrocarriles estatales quienes cobraron salarios exorbitantes durante el período de aumentos salariales caótico. Las familias que seguían en el registro de pensiones, por sus familiares muertos. Los políticos que contrataron a sus sobrinas y sobrinos como votantes, sus sobrinos y sobrinas que se dejaron contratar. Los medios de comunicación de Atenas están informando acerca de esto, sin duda. Pero lo que falta es el enojo de la catártica Grecia con sus conciudadanos. “Los populistas atenienses hablan duramente sobre Merkel, pero lo hacen de manera suave sobre los culpables de su propio país. Prefieren rabiar en una pesadilla lejana, que mirarse a los ojos a sí mismos. Esta debilidad, esta falta de talento para la autocrítica, es la crisis griega real.
Comercio de bienes robados – Suiza
“Las cantidades son enormes. Es suficiente con que los ojos de los políticos europeos se abran, con la codicia. Sólo en Suiza, los extranjeros, la mayoría de ellos ciudadanos de la UE, tienen 1.560 millones de euros escondidos. En Gran Bretaña y sobre todo en Channel Islands, cerca de 1.400 millones de dólares; en Luxemburgo, 440 millones de dólares y en Liechtenstein, 78 millones de dólares. Todos estos ofrecen ayuda a la evasión fiscal. Ellos absorben la riqueza nacional de otros países y viven de los intereses
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