Debemos entender que bajo las condiciones de la crisis que se
desarrolla en la actualidad, la presión sobre nosotros continuará
creciendo. Después de todo, mientras peor esté el mundo, más culparán
las naciones a Israel por sus problemas. Las naciones del mundo claramente
sienten que todo viene a través de nosotros, aun cuando nosotros mismos
no lo sepamos. Nosotros no sentimos ni entendemos por qué está
sucediendo de esta manera. Sin embargo, el tiempo ha llegado para que
comencemos a interesarnos en los orígenes del antisemitismo, a
investigarlos, a entenderlos y a hacer escrutinio de la causa de su
aparición. Sólo la sabiduría de la Cabalá nos
ayudará con esto, al explicarnos la fuente del pueblo judío. Esto se
debe a que esta fuente no es física. Nosotros no somos un pueblo común,
formado sobre una base genética como todos los pueblos. En su lugar,
procedemos de una fuerza espiritual, del origen de la unidad que nos
conecta y nos une a todos juntos en un todo único.
Lo que debe enlazarnos es el amor
fraternal, el amor de otros como a nosotros mismos, el cual no existe en
nuestro mundo. Todo esto pertenece al nivel espiritual, a una fuente
espiritual que debemos alcanzar una vez más. Ustedes puedes discutir acerca de esto y
no estar de acuerdo. Sin embargo, vengan; sentémonos, comencemos a
estudiar este asunto, a hacer escrutinio y a investigar con el fin de
descubrir la verdad. De otra manera no tendremos oportunidad de entender
lo que está sucediendo con el mundo y con nosotros, con nuestro pueblo. ¿Cómo podría ser posible establecer la
nación de Israel, establecer cuáles son sus fronteras y el sistema en
el cual vivirá el pueblo de Israel, si no sabemos qué es este pueblo,
qué tipo de red de lazos nacionales, sociológicos y sociales debemos
construidos para este? Hemos construido la nación de Israel de
acuerdo al mismo patrón en base al cual han sido construidas todas las
otras naciones del mundo, ¡y claramente esto no es apropiado para
nosotros! Vemos que esta es una nación enferma. Todo lo que sucede aquí
es un fenómeno malsano. Hemos construido esta nación de acuerdo a los
ejemplos que hemos tomado de las naciones del mundo, de acuerdo a las
leyes que se encuentran en la base de otras naciones que son más o menos
similares entre sí. De acuerdo a esas leyes de las naciones
del mundo, hemos establecido una nación para nosotros y la llamamos
“Israel” ¡Sin embargo esta no es la nación de Israel ni es el pueblo de
Israel, si vive en un sistema como este! Hemos embutido al pueblo de
Israel en esta plantilla, en este patrón que está diseñado para las
naciones del mundo y éste no puede existir de esta forma. Hemos reunido una multitud de personas
desde los confines de la tierra en esta área y hemos comenzado a
unirlos, a insertarlos en un marco prestado de las naciones del mundo,
pero esto no es apropiado en absoluto para el pueblo de Israel.
Entonces, hasta hoy, hemos existido sólo a través de la bondad de la
Fuerza superior.
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