¿Cuál es el cambio psicológico que tenemos que pasar?

La transición a la sensación del mundo superior no es más que un cambio psicológico a través del cual pasa la persona. Todavía ella siente nuestro mundo, sigue viviendo como de costumbre. Nada desaparece o escapa de ella. Sigue siendo la persona común y corriente: en la familia, en casa, en el trabajo y en todas partes. Pero además, recibe un “chasquido interior”, un cambio de fase que le permite comenzar a sentir otra cualidad existente en nuestro mundo: el atributo del otorgamiento. Este atributo es mucho mayor que el atributo de recepción en el que se basa nuestro mundo, porque es ilimitado, infinito y perfecto. ¡Es libre! ¡Es omnipotente! Por lo que es llamado “el Creador”. El atributo de otorgamiento mantiene nuestro mundo y lo nutre como una madre, incluyendo nuestro egoísmo, nuestro atributo de la recepción. Todo en nuestro mundo: los niveles inanimado, vegetativo, animado y hablante de la naturaleza, todos ellos son atributos de recepción. Nosotros, que somos el atributo mismo de la recepción, sólo percibimos este tipo de existencia egoísta. Cuando adquirimos el atributo de otorgamiento, empezamos a sentir fuerzas, campos y atributos totalmente diferentes, que son mucho más amplios y más sublimes que los de nuestro mundo. Cuando entramos en el campo del otorgamiento y empezamos a sentir, entonces todo nuestro mundo, el cosmos y el universo entero inmediatamente se reducen a una dimensión mínima. Todo lo que hay por fuera de nuestro mundo comienza a sentirse verdaderamente infinito e ilimitado, al igual que el atributo de otorgamiento mismo. Nosotros creemos que vivimos en él y nos desarrollamos a lo largo de 125 grados acerca de los cuales estudiamos en la sabiduría de la Cabalá. Espero que alcancemos este estado en la próxima convención. Todo depende únicamente de la preparación de las personas que se reunirán allí. Incluso si la gente que llega accidentalmente, con un deseo egoísta mínimo o los principiantes que no entienden realmente a que vinieron participan en esta reunión, esto no nos molestará. El punto principal es que si nosotros, todos los miembros activos del movimiento Bnei Baruj y los amigos del extranjero, nos reunimos y todos aquellos que no sean capaces de llegar se conectan con nosotros de manera práctica, entonces seremos capaces de incorporar fácilmente dentro de nosotros mismos a todos los nuevos visitantes y a los que sólo llegaron allí y que participan en esta conexión de manera involuntaria. Nosotros somos la clave, el núcleo y la parte principal de esta gran conexión para el alcance del superior.