El Maguid de Kozintz, “El trabajo de Israel”

 Nuestros sabios dijeron “dispersión es buena para los malvados y la convención es buena para los justos”,  esto es acorde a lo que dijo el Ari acerca de los mundos redondos en los que ningún círculo toca al otro y es allí donde ocurrió la ruptura hasta que el mundo fue corregido con honestidad. Esto significa que la mente de los círculos es como alguien que se voltea a sí mismo, se redondea y se separa de su Creador, cree que él se maneja a sí mismo con su propio deseo, es arrogante al decir “yo gobernaré”, lo cual es la ruptura. Así cada malvado se siente arrogante diciendo en su corazón: “yo gobernaré”, entonces ellos están en un mundo de separación y no se pueden conectarse como círculos, dado que sienten que no pueden morar juntos, por lo tanto, la dispersión es buena para ellos. Si las personas no pueden controlar su ego, ellas se sentirían mejor estando lejos unas de otras. Así, ellas se volverían compatibles con el sistema superior. El sistema superior está hecho de vasijas redondas y rectas. Un deseo directo significa que la persona puede ser recta y conectar “Israel, la Torá y el Creador”. Ella puede controlar su deseo de disfrutar, y en la medida que lo controla, puede utilizarlo para el beneficio de otros. Ella empieza a sentir que estas personas no son extrañas, sino que en realidad son ella misma. Lo que yo pensaba que era “yo” era sólo mi cuerpo animal, mientras que mi esencia humana era externa a mí. Toda la humanidad es en realidad mi “yo” espiritual, aunque todos parezcan estar ahora por fuera de mí y aunque parezca que yo quiero alejarme de ellas o utilizarlas para hacerles daño. Resulta que yo uso mi cuerpo espiritual para el beneficio de la corporeidad hasta que empiezo a comprender que mi verdadero cuerpo, mi alma, está realmente por fuera de mí. Sin embargo, si todavía estoy en mi ego, entonces cuanto más lejos nos encontremos unos de otros, mejor. Si nos conectamos, esto sólo empeora. Por lo tanto, con el fin de acelerar la evolución de la humanidad dentro de mi deseo egoísta de disfrutar, de repente se activa un nuevo programa, una nueva dirección. De pronto, decidimos conectarnos. Nosotros nos conectamos en un mercado común y todo se derrumbó, especialmente con el fin de acelerar el reconocimiento del mal. De hecho, sólo la dispersión es buena para los malvados, es decir para los que utilizan su ego. Después de todo, esto es como las vasijas redondas de los mundos superiores. Si una vasija no tiene un Masaj (pantalla), no obstante, es totalmente redonda y no toca a la otra. Si hay un Masaj, toda la vasija se vuelve recta, estos canales rectos se conectan y comienzan a influirse mutuamente. Por lo tanto, la conexión es buena para los justos. Si todos los deseos tienen Masajim, los utilizan para el beneficio mutuo, todos ellos se conectan y son alimentados por medio de un tubo común que les proporciona la Luz a todos. Resulta que el mejor uso de la sociedad es cuando estamos bajo el Masaj y recibimos todo como una vasija. Así, las diferentes corporaciones, los lazos comerciales y culturales sólo aceleran el reconocimiento del mal. Después de todo, los malvados se conectan sólo para descubrir lo antes posible la necesidad de pasar a una forma de vida diferente. Nosotros tenemos que mirar el mundo como el mundo espiritual. El mundo espiritual está hecho totalmente de vasijas directas y los círculos los hacemos nosotros a partir de los deseos que no puede utilizarse por el momento. Entonces, nosotros los restringimos como Maljut de Ein Sof (Infinito), que se restringió a sí misma y permaneció redonda, y luego crea una línea recta en la medida de su poder. Nosotros debemos tomar ejemplo de ella, aunque es muy difícil construir una línea recta. ¡Después de la primera restricción, sólo se crea una delgada línea en el centro del gran círculo vacío, pero esa es la línea recta que necesitamos! Después de todo, esta es la que determina el nivel de nuestra adhesión con el Creador. Cuando completemos la formación de esta línea, nosotros la añadimos a todo lo que podemos y sólo el “corazón de piedra”, la parte que no puede corregirse, queda por fuera. Entonces, tiene lugar una acción especial llamada Rav Paalim uMekabtziel, que completa la corrección. Nosotros no debemos mirar la historia de la humanidad como la vida de los cuerpos animados, sino como la evolución de las partes del deseo, cuyo sufrimiento crece constantemente. Como resultado, el sufrimiento se acumula hasta tal punto, que de pronto comprendemos que estamos viviendo bajo el liderazgo del “ángel de la muerte”, de nuestro ego. Cuanto más se desarrolla el mundo, más conectado y más global se vuelve. Los malvados se conectan, descubren el ego, nuestra impotencia y nos ayudan a alcanzar el reconocimiento del mal lo más rápido posible. Esperemos que nuestro grupo sirva como un modelo para la humanidad y le ayude a entender qué hay que hacer. Por otra parte, todos tendrán que reconocer el mal en ellos por sí mismos como consecuencia de los golpes que trae la crisis actual.