
Yo tengo que incluirme todo el tiempo en la carencia del amigo, otorgarle y así darle la oportunidad de otorgarme a mí. Cuando le doy un regalo a un amigo, incluyéndome en su carencia, yo construyo su figura dentro mi, cuando yo doy y el recibe. Después debo darle la oportunidad de otorgarme de regreso, que él sea él que da y yo el que recibe, para que no quede en él la vergüenza de recibir. Y así debe seguir consecuentemente y construir amor por encima del odio. Consejo diario para el que está en
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