Reflexión diaria 5/5/11

• La sabiduría de la Cabalá no es una sabiduría antigua, sino del futuro. Cuando comencemos a conectarnos de modo que nos adaptemos a nosotros mismos, al mundo que se revela como integral, y de tal forma nos equilibremos a nosotros mismos con la naturaleza, descubriremos nuevos fenómenos y nuevas leyes – esta es la sabiduría de la Cabalá.
• La espiritualidad se mide según cuanto la persona se encuentra por encima del deseo, por encima del ego. En cuanto pueda la persona elevarse por encima de su "yo", ahí es donde descubrirá la espiritualidad.
• Todos los niveles de las Luces en la espiritualidad, se miden a medida en que nos juntamos y nos conectamos a pesar de los cambios entre todos. Hasta que en la última corrección somos capaces de unirnos por encima del descubrimiento máximo de las diferencias entre nosotros, y esto ya significa un sólo Kli (vasija).
• Si queremos alcanzar lo que está escrito en el Zohar, debemos unir nuestros deseos para ello, y solo con la condición de que sea como un sólo deseo en ese momento veremos lo que está escrito.
• Tenemos que hacer en nuestras acciones preparativos en relación al mundo, de forma en que todos reciban y entiendan hacia dónde va el mundo, y que el remedio, la salvación está en la conexión – porque en la conexión se descubre una nueva fuerza, adicional, que es capaz de salvarnos.
• Precisamente desde nuestro trabajo interno, llegará la fuerza de la corrección para el mundo.
• Cualquier acción de conexión que no se haga a través de la Luz Superior, no tendrá éxito.
• El mundo debe llegar a un estado en el que está completamente destrozado - o por el rodillo del desarrollo, o que se vea a sí mismo destrozado por adelantado, antes de que lleguen los sufrimientos físicos, como resultado a la difusión de la sabiduría de la Cabalá a todo el mundo.
• Debemos llevar a la humanidad a la carencia correcta por la conexión interna, por la corrección del deseo, y a continuación podremos pasarles la Luz que corrige.
• Cuando llegamos al estado del infinito pasamos a un concepto especial, que no obra bajo nuestras restricciones. Este estado se llama “infinito”, no porque todo ahí sea salvaje y sin límite, sino porque en este estado todo esta corregido y por lo tanto no hay ninguna limitación.
• La sensación de que ya sentimos nuestras especulaciones internas de que estamos conectados con nuestros deseos juntos, trae a la persona a sentir al mundo de otra manera. Y en este estado, el tiempo, el movimiento y el lugar empiezan a recibir una forma relativa.
• Si nosotros nos unimos, llegamos a un sentimiento en común – que no es tuyo y no es mío, sino mutuo. Sólo esta es la verdad. Hasta ese entonces no sabremos cómo comparar nuestras medidas y nuestras sensaciones.
• Cuando comenzamos a conectarnos entre nosotros más y más, podemos descubrir nuevos fenómenos, ya que estamos cambiando sustancialmente como observadores. Por lo tanto hasta que los físicos no se conviertan en más espirituales ya no revelarán más nada.
• El problema de los físicos es que ellos todavía están en una observación externa y no aceptan el hecho de que toda la realidad se encuentra dentro del espectador.
• El tiempo es el número de pasos que nos quedan hasta el final de la corrección; estos estados pueden pasar más rápido, con una buena sensación o lentamente y con una mala sensación, esto depende de la influencia del entorno sobre la persona.