¿Por qué hay un periodo en nuestro desarrollo llamado juventud?

Esto es con el fin de ingresar en la vida. Si los jóvenes supieran y entendieran cómo hacerlo de forma correcta, aprenderían primero que nada de los sabios y tratarían de explorar todos los impulsos que la juventud tiene, con la ayuda de los adultos.

Pregunta:¿Cuáles serían las relaciones entre los jóvenes y sus padres, ya que en general, nunca los escuchan?

Dr: Laitman El problema entre padres e hijos es un problema eterno que se repite en cada generación, desde el tiempo de los antiguos filósofos griegos: Platón, Aristóteles y Sócrates. No hay nada nuevo aquí.

Hoy en día, el problema está relacionado, no sólo con padres e hijos sino también, con madres e hijas. En el pasado, los hombres trabajaban, iban de viaje, exploraban nuevos lugares e inventaban distintas cosas, mientras que las mujeres eran excluidas totalmente de estas áreas y se esperaba que se sentaran en silencio en su casa y se involucraran en las tareas domésticas.

Por lo tanto, antes, se consideraba un problema de padres e hijos, hijos varones, hoy en día es un problema mucho mayor y esto existe también entre madres e hijas.

Básicamente, no veo la relación entre padres e hijos como un problema, ya que todo se deriva de nuestra evolución. Somos la única parte en la naturaleza que se involucra de tal forma turbulenta de una generación a la siguiente.

La siguiente generación no siente que pertenece a la generación anterior. Creen que la generación anterior es irremediablemente anticuada porque hay un gran cambio de deseos, intenciones y metas.

Lo veo en mis hijos y especialmente en mis nietos. No los entiendo, pero entiendo y percibo el hecho de que no los entienda. Ellos tienen una actitud distinta hacia la vida.

Entonces, ¿qué podemos hacer? Tanto la generación vieja como la joven deben pasar por una educación mutua para que puedan establecer una comunicación adecuada entre ellos; de lo contrario, se desconectarán totalmente.

La generación más jóven exigen que se le de comida, albergue, vestido, lo que hagan es su problema y no de sus padres. Ciertamente esto no es la solución a la situación. Al mismo tiempo, la generación vieja no puede decirle qué hacer a la generación jóven y esa no es la solución correcta.

Debe haber una aspiración común continua para la conexión y el entendimiento mutuo, pero principalmente una aspiración para determinar la meta correcta, el alcance del atributo de amor absoluto por parte de toda la humanidad, conexión mutua absoluta, otorgamiento absoluto del uno al otro.

Si la meta es correcta, conecta a todas las generaciones pero, en primer lugar, debemos revelarla. Primero debemos enseñar a la generación vieja para que entiendan la meta de la evolución de la humanidad, cómo está avanzando hacia esta meta y cómo la percibe.

Si es percibida de forma correcta tanto por la generación jóven como por la vieja, desaparecerán toda la oposición y conflictos entre ellos. La generación vieja verá esta meta, lo que ésta puede ofrecer, cómo ejecutarla en su paradigma y la generación jóven la percibirá en su paradigma. Entonces, estas dos generaciones se integrarán una en la otra y se ayudarán a alcanzarla unos a otros.