Por un lado, una persona se corrige a
sí mismo cuando descubre que el egoísmo dentro de sí es considerado
muerto pero, por otro lado, es un ascenso, una liberación para el ego.
El hecho de que las personas murieron por el veneno de la serpiente
significa que fueron liberadas del egoísmo, así que continuaron
avanzando. Debemos ver que todo lo que nos habla la Torá es un cuerpo
(un deseo) en la persona, y no en diferentes personas, es decir, se
trata del ego que tiene que alcanzar el nivel de asemejarse al Creador.
“Muchas personas de Israel murieron” significa que el egoísmo en
el nivel espiritual actual se ha ido. En el próximo nivel ascenderemos
más y se repetirá lo mismo en un nuevo nivel. De hecho, no existe otra
manera porque el sistema general es circular y totalmente cerrado.
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