Un grupo
de estudiantes de la Cábala tiene como base un amor puro, absoluto y en
un grupo así no obedeces a quienes lo dirigen, sino sólo la meta
espiritual. Por lo tanto le corresponde a la persona decidir si unirse o
no.
En una secta, por otra parte, hay muchas
condiciones; es muy limitada y cerrada, tiene una ideología distinta y
mientras más te acercas al centro de la secta, más y más oculta se
vuelve. Una secta también tiene rituales típicos como oraciones,
meditaciones, etc. Este tipo de cosas no son parte del estudio de la
sabiduría de la Cabalá.
Un grupo de cabalistas no es cerrado. Se basa en el principio del amor, honestidad, afecto, inclusión y ayuda mutuos,
de acuerdo con los principios de los cabalistas y las fuentes que se
estudian. El único ritual que se alienta es compartir la comida.
No hay condiciones en cuanto a religión,
raza ni nacionalidad. Una persona que quiere unirse al grupo es
aceptada y si quiere irse, puede hacerlo. Todo es abierto y libre; todos
los materiales de estudio están disponibles en Internet en todos los
idiomas; no hay ni barrera ni separación.
La sabiduría de la Cabalá alienta la unidad del género humano en el amor y buenas relaciones mutuas, sin ningún tipo de coacción, igual para todos y con todos.
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