¿Podemos medir el deseo del grupo?

Sí, si este realmente es un grupo; es decir si tiene un sistema establecido en el que ustedes vean las diez Sefirot. Después de todo, un grupo real es algo que existe en sí mismo, un mecanismo espiritual, una estructura espiritual, un cuerpo espiritual.

Pregunta: ¿Qué se interpone ahora entre nosotros y un grupo así?

Dr: Laitman La falta de conexión. Debemos establecer una relación correcta entre nosotros que esté llena de dedicación, unidad y apoyo. Necesitamos sentir que no hay otra alternativa, que este es nuestro deber; de lo contrario, no alcanzaremos el atributo de otorgamiento y no le daremos contento al Creador a través de los amigos y el maestro. Nosotros no seremos capaces de avanzar sin conexión, no seremos capaces de salvar al mundo y no seremos capaces de deleitar al Creador. Además, sin el fortalecimiento de nuestra conexión mutua, traemos daño, como alguien que taladra un agujero en un barco común. Baal HaSulam escribe en su artículo “La Paz“, que la sociedad castiga el robo, pero si la persona no añade sus esfuerzos, no hay castigo. Mientras tanto, aquel que “reza”, lo hace por sí mismo y daña a la sociedad. Después de todo, la verdadera oración sólo puede producirse por una comunidad de personas que quieren traerle contento al Creador por medio del otorgamiento mutuo. Solo, ninguno de nosotros es capaz, porque yo no tengo ese “lugar”, ese deseo, desde el cual dirigirme a Él. No hay Creador sin la unidad de los seres creados que quieren otorgarse mutuamente unos a otros, dándole así a Él un “lugar” para revelarse entre ellos y disfrutar. De una vez por todas yo tengo que entender que no tengo ningún “lugar” que llenar, que no hay fuerza que me ayude a otorgar; que no hay nada. Todo está únicamente en la conexión entre nosotros.