Si traducimos el lenguaje de la tierra en leyes espirituales muy simples, entonces escuchar es Bina y ver es Jojma.
Los sordos son personas que no poseen el nivel de Bina, la cualidad de otorgamiento, y los ciegos son aquellos que no tienen el nivel de Jojma.
Por lo tanto, se dice, no pongas obstáculos en frente del ciego porque
tropezará, dado que no hay sensores, ningún dispositivo interno para
ver, para analizar, y determinar lo que es bueno y lo que es malo en
estos niveles.
Un obstáculo e todo lo que pueden usar
adecuadamente durante el camino espiritual. Si ustedes tuvieran la
vista, no definirías esto como un obstáculo sino como una oportunidad de
sobrepasar y elevarse al siguiente nivel. Después de que la persona
ciega enfrenta un paso aunque sea invisible, ella tropieza y cae, pero
aquel que ve los pasos se eleva cada vez más alto. Todo depende de si
eres capaz de hacerle frente a este obstáculo, transformándolo en un
elevador para el ascenso a lo largo de la escalera espiritual.
Resulta que el sordo no es capaz de subir al nivel de Bina con la ayuda de los obstáculos y el ciego no es capaz de hacer lo mismo con respecto al nivel de Jojma.
Por lo tanto, ustedes deberían sentir el nivel de la otra persona, qué
es para su beneficio, qué no y conducirla amablemente, como un niño
pequeño, entonces empezará a estudiar, a ascender, a descender, pero no a
caer. Es así como deberían tratar al prójimo, siguiendo la regla de
“ama a tu prójimo como a ti mismo”.
Nosotros educamos niños a través de
ligeras enseñanzas y moral en nuestro mundo. Un serio análisis y
comprobación toma lugar en el mundo espiritual en cuanto a si es posible
convertir los obstáculos en un nivel de ascenso.
Es por esto que tienen que actuar de tal
forma que haya obstáculos frente a los demás, por medio de los cuales
ellos asciendan. Deben entrar en la otra persona, entender en qué nivel
está, e incluso ayudarla a encontrar un obstáculo que pueda superar.
Este es el apoyo mutuo, cuando todo se
mezcla en una causa común, por una parte, revelarse los obstáculos unos a
los otros y por otro lado, ayudarse a sobrellevarlos. Así, apoyándose mutuamente unas a otras, las personas se elevan como escaladores de montañas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.